Las condiciones meteorológicas de la primavera de 2016 han resultado imprevisibles provocando importantes perjuicios en los resultados de la vendimia, en algunas regiones de Europa. Sin duda, las lluvias han aumentado significativamente las reservas hídricas, pero por el contrario han favorecido la aparición de “mohos”.En Francia, el 27 de abril, fue un día nefasto para los “Vignerons de Borgoña”, debido a la helada inesperada que afectó a los brotes de los viñedos; lo mismo sucedió en Italia, donde las insólitas y bajas temperaturas en los meses de primavera, provocaron la destrucción de 500 hectáreas de viña en Abruzzo.
El viticultor padece directamente los efectos del cambio climático, y con la mirada fija en el cielo, intenta descifrar lo que le puede deparar la madre naturaleza. Ante esta situación, cada vez más el viticultor precisa de una ayuda para afrontar cosechas deficitarias, y es aquí, cuando Permeare, empresa líder en Tecnología Enológica es protagonista. Un año de duro e intenso trabajo, no puede irse al traste en un día, por ello el viticultor precisa de un aliado y lo encuentra en PERMEARE. La ayuda que proporciona Permeare, es extremadamente natural y respetuosa con las cualidades organolépticas del vino a tratar, ya que sus instalaciones han sido dirigidas a trabajar a bajas presiones y con consumos energéticos mínimos; con software, capaces de reconocer y ajustarse a las condiciones de partida del vino. Por ello, la ósmosis inversa para la concentración de mostos es la única opción para cosechas poco prometedoras. Igualmente, el nuevo sistema de filtración de los posos PERMASTONE, puede garantizar óptimas recuperaciones de productos, respetando sus cualidades intrínsecas.
La campaña de pruebas de PERMEARE ha comenzado y está asegurado que va a dar a las bodegas que están probando esta tecnología, resultados favorables y sorprendentes, sobre todo si los comparan con los de otras maquinarias utilizadas para el mismo fin.